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lunes, 23 de mayo de 2011

¡No te enojes tierra mía!

¡Oh!, tierra mía, ¡oh! tierra nuestra
Que susto nos diste anoche
Cuando en la total obscuridad
De un rugido nos despertaste
Con movimientos nos retaste

Mucho daño te hemos hecho
A causa de nuestras ambiciones
Mucho daño te haremos
Por lo inconciente que somos

Pero tierra mía, perdónanos
Ya saboreamos tu furia
Ya probamos tus lágrimas
A más de alguno has mordido

La maldad aquí sobra, lo sabemos
Alguna vez ahí pertenecimos
Pero si redimirnos no es posibilidad
Entonces de que sirve la verdad

Dime tierra mustia, dile a este sol que brilla
Porque todo se ve color grisalla
Nosotros te habitamos, no somos visita
Y aunque daño te hagamos
No nos eches, invita.