A esta rima.

¡Salud! por la rima
por la rima que asesina
si no es escrita
y por la que se esconde
también por la casual
que nace de pronto
así por la que muere
en las malas lenguas
y que me enfurece

Vuelve la rima a mi sangre
después de dormirles
con humo de cigarro
y saltan se escapan
pues recién son libres
y las líricas me agradecen
el poder nacer
me agradecen el estar ahí

Dame la mano querida rima
hagamos un poema
una canción; un soneto
hagamos juntos un dueto
que desborde por completo
lo que antes cante, lento
con música y pintura
brillemos la escritura
que se ocultaba

esta danza, que de letras
en pentagrama suenan
como antes, pude cantar
y rimando, rimando
deje de rimar, solo
para aprender a quererte
pues tenerte es privilegio
y olvidarte mi pecado

Mujer de la huida

Ser tu  tiempo;

en un sueño leerte

mientras lees un canto

de tiernos versos

que te renombran

y tu no sabes; no sabes

Con este saludo guardado

esperando un guiño, 

de tu pelo modelo

rasguñar tus miradas

mientras pienso tu vida

como la mía propia

Escribo en un árbol

las letras de tu nombre

siempre frio y seco

la corteza de mi lapiz

que sobrado de tinta
ama escribirte siempre

Sin escusas ni piedad
pude mil veces verte
sin ser visto
y quedarme dibujando
tus pasos en letras
que con eco se alejan raudos
como escapando

cómo saber si eres
o nunca fuiste
lo que escribí
fuiste lo que quise que fueras
sin saber si existías
ni que tu supieses
que yo existía

te perseguiré en sueños
te buscare en la oscuridad
mientras brilla tu sonrisa
que se aleja, se desdibuja
de mis bosquejos
que se borran
se terminan

Querer estar

Conosco mis limites
cada vez que los pierdo
y sé que amo
cada vez que odio
odiar sin amar
aunque amo, amor odioso
Amor odioso, amor celoso

Amor, amante
dolor de amor
dolor constante, vivir
vivir o morir, por amor
o por odio, es morir
Aunque eso no importa
si por amor se muere

y muerto esperaré
mil años para verte
en otra época, lugar
donde estemos juntos
y volemos tan alto
tan alto, tan alto
y estemos solos, tan solos

Ella, es otra ella.

Esta vez hay algo distinto

¿sera el color de sus labios?

creo que es su rostro

o sus manos blancas

Sera ese beso soñado

un beso sutil, casi muerto

tan suave como un susurro
frió y apretado, lento

lento como si la vida

se detuviese, por segundos

como mordido, modelado

un beso anhelado, apasionado

quizás es esa fina delicadeza

esos actos sin maquillaje, quizás

sea ese pelo sin pretensiones

que busca ser bello a su manera

y es que antes lo había visto

tan solo en fotos de divinidades

es tal la idolatría, que por un beso

por un beso me arrancaría el alma

no sé, qué es lo que vi

o lo que no estoy viendo

solo sé que es por ti;

porque ahora estoy riendo

Mira mi silencio, tan romántico

y escucha mis miradas, querida

grita mis besos de lejos y que

mis abrazos no te alcancen 

cuando te alcancen da mil giros

te sabre mecer en el baile 

como pluma con su tandeó 

como una niña y su pestañeo

como tu mirada, calmada

como tú, simplemente

una estrella en la tinta de mi lápiz

un sollozo desde el fin.

Esa es la historia

Riendo de pena un día
Comencé a ver los grises
y se veían negros; blancos
Los colores eran cenizas
que se diluían con la lluvia

La lluvia era vida desprendida
que corría por los brazos del viento
que con rabia suicida, se estampaban
entre gota y gota, se hizo un charco
y del charco un lago profundo

Como se forman los mares
se formo una isla, en medio del lago
donde lloraba una sombra
sombra oscura llena de dolor
que se encadenaba a un amor
Muerto, olvidado, desesperado

Impera la muerte sobre la vida;
en la historia del amante fugaz
que con cada luz de día
escapa su oportunidad de amar
y tal como dijo no hacerlo
repite su error en contraste

Sálvate ¡oh! ¡mendigo!
Deja de esconderte tras los besos
y comienza a nadar tal cual
aquel naufrago, que de lagrimas
creo el mar que lo atrapa
y que lo ata a las sombras